miércoles, 19 de mayo de 2021

LOS HUMANOS SOMOS UNA ESPECIE, NO UNA RAZA.

 LOS HUMANOS SOMOS UNA ESPECIE, NO UNA RAZA. PODEMOS TENER HIJOS ENTRE DISTINTAS ETNIAS




(TÍPICO DE LAS ESPECIES, SOLO HAY EXCEPCIONES EN ALGUNOS ANIMALES Y SUS HIJOS NACEN ESTÉRILES ).¿ SE DIERON CUENTA QUE NUESTRAS SOMBRAS, AÚN TENGAMOS DISTINTO COLOR EN LA PIEL, SON TODAS IGUALES?Al decir “algunas especies biológicas” es evidente que involucra o por el contrario excluye a la humana.
La raza es una condición que se determina por el genotipo, es decir, el conjunto de genes que contiene un organismo heredado de sus progenitores. Debido a esto es que no se debe subdividir la especie humana, ya que el genoma humano es el mismo. Los seres humanos presentan características físicas que los hace ser distintos, sin embargo, éstas vienen dadas por el fenotipo.
y éste es lo que permite percibir los rasgos físicos como el color de piel, el color y textura del pelo, el tamaño, entre otros rasgos visibles.
Es decir, científicamente, está demostrado que genotípicamente los humanos somos iguales y que por rasgos físicos no se pueden subdividir en razas, expone el catedrático.
PREJUICIOS SOBRE DE LA PALABRA RAZA
El uso desatinado de esta palabra obedece a una construcción social del término, señala el profesional consultado.
El uso incorrecto de la palabra raza en lo referente a las personas es que ha provocado durante largos años luchas sociales, genocidios y prejuicios que hoy día prevalecen, perjudicando la dignidad humana y las relaciones entre sociedades y naciones, apunta De la Cruz Miró.

lunes, 10 de mayo de 2021

naturaleza sabia! Seguro se resguardan de sus depredadores

naturaleza sabia! Seguro se resguardan de sus depredadores
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Una extraña orquídea con cara de mono y olor a naranja
Una de las tantas curiosidades de la naturaleza. El nombre científico de esta orquídea es Drácula simia, pero se le conoce popularmente como orquídea cara de mono, por el parecido de sus flores a la cara de un simio. Proviene de la selva ecuatoriana y los bosques peruanos a una altura de 1000 a 2000 metros, por lo que muchas personas no tiene acceso a ella.
El nombre de Drácula proviene de la extraña característica de los dos espolones largos de los sépalos, que recuerdan los colmillos de un cierto número de habitantes de Transilvania en el cine y la ficción.
La orquídea fue nombrada en el 1978 por el botánico Luer, pero está en una familia que contiene más de 120 especies que en su mayoría se encuentran en el Ecuador. Arriba en las montañas las orquídeas mono pueden florecer en cualquier momento, no es específico de la estación. El aroma se asemeja al de una naranja madura.
Sociedad Argentina de Horticultura

lunes, 3 de mayo de 2021

RESTITUYEN A CACIQUE TEHUELCHE DESDE PARÍS A CHUBUT-Se trata de Liempichun Sakamata, oriundo de Chubut, que había sido llevado al Museo del Hombre de París a fines del siglo XIX para su exposición.

 Se trata de Liempichun Sakamata, oriundo de Chubut, que había sido llevado al Museo del Hombre de París a fines del siglo XIX para su exposición.

"Esta historia comienza en realidad cuando profanan su tumba, se lleva el cuerpo el conde Henry de la Vaulx a Francia. En 2015 iniciamos con las comunidades de Chubut -con sus descendientes directos- el pedido al Museo del Hombre de París", contó Fernando Miguel Pepe, integrante del Colectivo GUIAS (Grupo Universitario en Investigación en Antropología Social) en diálogo con Cacodelphia. La Vaulx había recorrido la Patagonia, donde tuvo contacto con caciques de la región y comenzó a profanar sus tumbas y robar sus esqueletos. En este caso, también se llevó consigo el ajuar funerario de Liempichun Sakamata que permanece en otro museo francés.

Pepe también explicó que sólo hay antecedentes muy puntuales de restituciones por parte de esta institución parisina, entre las que se encuentran el caso de cuerpos de combatientes argelinos anticoloniales -una gestión iniciada recientemente por el presidente de Argelia- y la de Venus Hotentote, impulsada por Nelson Mandela.

"El Museo del Hombre de París ha hecho muy pocas restituciones y la mayoría fueron por presiones de primer nivel", resaltó. Además, el antropólogo explicó que no hay normas a nivel internacional que obliguen a los museos a hacer restituciones de este tipo, por lo tanto, cada situación se resuelve con una ley específica.

Hasta el 2009, el cuerpo de Liempichun Sakamata estuvo en exhibición en la institución parisina, hoy está guardado en uno de sus depósitos aguardando el regreso a su tierra de origen. "Tuvimos que esperar años porque nos decían que iban a hacer una ley general de restituciones (en Francia) cuando se modificara la ley de cultura, esperamos dos años, se cambió la ley pero no modificaron para nada el tema de las restituciones, o sea que tuvimos todo ese tiempo de espera de las comunidades y no resultó. Sigue siendo necesaria una ley específica, pero el antecedente de Argelia fue muy bueno", dijo a Cacodelphia.

"Sería la primera vez que una restitución internacional llegue directamente a Argentina", agregó.

Este reclamo, impulsado por las comunidades y fue ingresado por el Colectivo GUIAS, y gestionado por el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) con el apoyo de la Cancillería Argentina. "Logramos que en la mesa política entre  Argentina y Francia el Vice Canciller plantee la importancia de la restitución. La política de reconciliación de las memorias marca un camino, y la presión política del gobierno actual marca un hito en este reclamo", sumó

sábado, 1 de mayo de 2021

Árboles que a su vez protegían al mapuche,


 

💛
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Antes de la entrada del wingka a #Wallmapu en 1883, con la ocupación de la Araucanía, nuestra mapu estaba llena de árboles ancestrales milenarios protegidos por sus hijos mapuche.
Árboles que a su vez protegían al mapuche, le daban su alimento y refugio. Temu, walle, lawal, koywe, boldo, peumo, luma, triwe, foye, pewen, gefuñ, tepa, mañío, ulmo y muchos otros.
Esos árboles eran inmensos y anchísimos luego de crecer lentamente por siglos. Su madera estaba apellinada, dura como metal. Eran el paisaje del bosque o selva fría de Wallmapu.
Inmensos bosques, prácticamente impenetrables, eran lo que se conoce como Mawiza. La vida brotaba por todas partes bajo esos ancianos vegetales.
Esa mawiza proveía a nuestros bisabuelos y abuelos de comida cuando escaseaba en invierno el fruto de las estaciones de primavera y verano. Changles, llonkoño, ziweñes, todo tipo de fruto del bosque era alimento estacional para nuestra gente, nuestros mayores.
De esos árboles es que mucho mapuche tiene su apellido, kvpalme de sus antepasados y el propio. De esos árboles muchos territorios mapuche llevan su nombre, la denominación de su tuwvn.
En medio de esos bosques caminaron Leftraru, Kewpulikan, Pelonxaru, Lientur, Magiñ, Kallfvkura, Kilapag. Esos bosques tenían siglos de ser testigos de nuestra historia. Vieron el desenlace de nuestra resistencia frente al español primero y luego frente al chileno y argentino. Esos bosques sabían quienes eran los hijos de esta mapu.
Antiguos machi por siempre encontraron lawen para la medicina del cuerpo, para sanar el espíritu. En los menoko, en los esteros, en los lugares húmedos del bosque o mawiza. Siempre había medicina para el machitun, el lawentuwun.
Si desaparece el lemuntu, el bosque, se pierde el equilibrio del ecosistema que el mapuche siempre cuidó que no se rompiera.
El wingka entró a la fuerza en nuestro territorio, lo ocupó militarmente, lo repartió a colonos, taló nuestros árboles y ganó dinero exportándolos, comercializando y vendiendo la madera de ese bosque milenario. Décadas más tarde los colonos lo vendieron a latifundistas, los que vendieron a transnacionales que llenaron de especies exógenas, o sea, no nativas y así provocó un desastre natural en el ecosistema.
En el lapso de un siglo, esos árboles ancestrales fueron exterminados y luego reemplazados por otros que crecieran rápido para su pronta venta y explotación, así llegaron pinos y eucaliptos.
Ahora el paisaje de la mapu está lleno de plantaciones forestales, transnacional. Nada crece en el suelo de esas plantaciones, no hay lawen, no hay hierbas medicinales, no hay agua, son desiertos verdes que acidifica la tierra.
A falta de agua ahora esteros, vertientes y humedales han desaparecido. Hierbas medicinales han desaparecido. Los ríos se han vuelto pequeños, los pozos ya no dan agua. Nada en algunos sectores.
Flora y fauna mapuche que ha habitado esos espacios está desapareciendo por el fuerte impacto ambiental negativo que producen las plantaciones forestales.
El agua se va de los espacios antiguos donde había gente. La vida de la mapu ha ido cambiando junto con el reemplazo de especies arbóreas.
Esos árboles que nuestros ancestros nunca tocaron por el respeto y cariño que les tenían, por la conciencia de que eran nuestros dadores de vida y protectores de nuestros espacios, esos árboles han desaparecido en su gran mayoría por la acción depredadora del wingka.
Exterminar árboles centenarios, milenarios.
Exterminar y reemplazar por especies extranjeras. En un siglo han creado un desastre ecológico nunca antes visto.
Los ancianos árboles ya no están.
Se han ido, pero no han desaparecido todos ellos. En determinados espacios aún quedan algunos anchos, muy anchos ancianos.
Sus hijos, los mapuche, se encargarán de replantarlos, de favorecer su brote otra vez.
Feley may.
Kimun: Ignacio Kallfvkura.